Terraduero


En la Semana Santa de Mombuey todo el mundo se echa a la calle (hombres, mujeres y niños) para continuar esta sentida tradición. Los desfiles procesionales son llevados a cabo por la Cofradía de la Vera Cruz desde tiempos remotos, comenzando el Domingo de Ramos y siendo los cuatro últimos días de la Semana los más emotivos.

Cristos de MombueyAntes de iniciar la procesión, el visitante debe saber que debe ir bien perpetrado con una carraca que hará sonar junto con el resto de vecinos, creando un gran estruendo, antes del inicio de cada procesión. El repicar de las campanas está prohibido hasta el día de la Vigilia Pascual por lo que la carraca es el sonido utilizado para avisar a vecinos y visitantes del inicio de las procesiones.  Además, durante estas, tiene lugar una bonita tradición en la que los pasos se detienen, no al cante de las saetas como en otras zonas de la geografía española, sino de las poesías que los fieles dedican al Cristo y a la Virgen.

En el Domingo de Ramos, los vecinos se arremolinan en la Plaza de la Farola para bendecir sus ramos de olivo y laurel, que colgarán en los balcones de sus casas durante el resto del año.  Con estos ramos, se trasladan hasta la Iglesia donde tiene lugar la Santa Misa.

Ya el Jueves Santo, por la tarde, se celebran los Santos Oficios y se traslada al Santísimo al Monumento. Al caer la noche, es la Dolorosa quien, acompañada de sus Damas, vestidas de riguroso luto negro, desfilan en procesión siguiendo la imagen del Cristo crucificado. Además de esta imagen estremecedora, la procesión es acompañada por un coro de hombres que cantan el Misere en Latín enmudeciendo incluso a los menos devotos. Los cofrades van vestidos con túnica morada y caperuza del mismo color, portando en sus manos un rústico farolillo metálico alumbrado por la luz de una vela, confiriendo a las calles de Mombuey un ambiente solemne de lo más especial.

El Viernes Santo, por la mañana, tiene lugar la procesión del Vía Crucis donde se rememora el calvario de Cristo en su recorrido por las calles de Jerusalén hasta el lugar de su crucifixión en el Monte del Calvario. El Cristo de Medinacelli, es seguido por el Nazareno y finaliza con la conmovedora imagen del Cristo en la Cruz acompañado por la Virgen y San Juan.  

Ya en la tarde del Viernes Santo, se recuerda el entierro de Cristo y tras los Santos Oficios, sale en procesión el Sagrado Cristo de la Cofradía de la Vera Cruz, que yacente, en su antiquísima Urna va seguido por una desgarradora Dolorosa y por San Juan. Los niños, que también participan en los actos, visten túnica morada con la cabeza descubierta portando las nueve tablas con los signos de la Pasión.

Ya en la noche, una estremecedora Virgen de la Soledad, recorre las calles de Mombuey en silencio, tras el Santo Sudario, en la denominada procesión de La Carrera.

El sábado, día de recogimiento, se reza un Via Crucis en la Iglesia por la mañana, y en la noche, en el interior del templo, la solemne Vigilia Pascual conmemorando la Resurrección de Cristo donde repican enloquecidas, ahora sí, las campanas de la Torre.

El domingo, es ya un día de celebración que vecinos y visitantes viven con gran emoción. Tiene lugar en este día la procesión de El Encuentro en la que hombres y mujeres salen por separado a recorrer las calles. Las mujeres acompañando a la Virgen y los hombres al Cristo Resucitado. En la Plaza de la Farola, los asistentes esperan impacientes al Acto del Encuentro, donde se funden en una las dos procesiones y la Virgen vuelve a reunirse con Jesús. Entre aplausos y halagos a los pasos, los asistentes se dirigen hasta la iglesia parroquial.

Para terminar esta semana de tradiciones profundas y arraigadas, se reúne en la tarde el Consejo de la Hermandad en Magna Asamblea.